El ex camarista Juan Pablo Morales fue absuelto por el beneficio de la duda en el juicio que culminó esta tarde, donde se lo acusó de integrar una banda narco. Morales siguió la sentencia desde la Policía Federal en Pergamino, donde se encontraba después de haber ido a pasar el fin de semana largo.
También, durante la lectura del veredicto del Tribunal, se conoció la absolución para Marcos Soruco, Ramón Baigorrí, Gabriel Lazarte y Emilse Aráoz, también por el beneficio de la duda.
“Morales no se estaba escapando”
El abogado de Juan Pablo Morales, Luciano Rojas, dijo que no compartió la determinación de Morales de viajar a Pergamino, su lugar natal, en la antesala del veredicto.
Señaló que personalmente le dio “mucha satisfacción” el veredicto unánime del Tribuna Oral Federal porque Morales “es un amigo, además de ser mi representado, y espero que pueda retomar su vida y ejercer su profesión” con naturalidad.
“Vamos a esperar los fundamentos y ver el análisis lógico para la conclusión”, marcó además, consultado por el siguiente paso en la causa. “Nunca debimos haber llegado a este momento”, explicó, porque “no hubo un solo testigo que pudiera mencionar que Morales tenía que ver” con la banda narco y que la causa “estuvo al límite de lo ridículo”.
En ese sentido, ratificó que es necesaria “una purga del Ministerio Público Fiscal” al notar “un criterio ambivalente” para distintos casos. “Tiene un temperamento en una causa y otro en otra causa. No hay reglas claras”, señaló.
Por otro lado, Rojas dijo que “Morales no se estaba escapando de nadie, solamente estaba buscando tranquilidad para su espíritu, puedo no compartir, pero lo entiendo”, por el viaje a Pergamino.
Los fundamentos de la sentencia se conocerán el próximo 27 de septiembre.